martes, junio 05, 2007

Mi caja de bombones


Es sentirse mudo al sonido, inmóvil ante tanto transito prepotente. Es cantar en voz de silencios no adecuados. Es recibir la mezcla de la marea que pasa una y otra vez sobre todo lo que has trabajado. Es encontrar frases que marcaron hitos, ver momentos que han quedado ahí, en el mejor de los recuerdos, pese a todo a lo vivido. Es reforzar sentimientos, refiriéndome claramente a todo eso que ha sabido avanzar junto a mi vida. Es recordar. Revivir. Resentir. Es avanzar sin sentirlo. Es apoyarse entre altos y bajos, que tanto por su lado como por ese que no se nombra, han de seguir haciendo su trabajo. Es abrirlo y ver que todo está ahí, apilado en desorden, llamándote desesperadamente, intentando crear una explosión. No exagero. La fuerza se acumula en lugares estratégicos. La fuerza se siente, para bien o para mal. Supongo que hoy, soy solo yo y mi caja de bombones.